La clínica actual, ya desde hace
tiempo, trató de reducir la complejidad del síntoma –con su doble vertiente de
denuncia y satisfacción- al trastorno, aparentemente simple, identificable y
apto para ser eliminado con un buen protocolo.
Pero mientras haya sujeto, habrá
síntomas –lo que no funciona- y por tanto nos conviene más orientarnos, como
política en la dirección de la cura y en otros ámbitos, como el social, por el
síntoma. Él es nuestra principal brújula para acceder a ese real que nos
constituye a todos como seres hablantes. El síntoma, a diferencia del
trastorno, llama a la interpretación, nos convoca como un enigma a descifrar,
algo cuya significación no conocemos de antemano.
Los psicoanalistas no
constituimos un partido político en tanto tales, otra cosa es lo que cada uno,
como ciudadano, decida hacer. Pero eso no nos exime de tener una política. Una política
centrada en la lectura de los síntomas contemporáneos, siguiendo la orientación
que nos daba Lacan en 1953: “Mejor pues que renuncie
quien no pueda unir a su horizonte la subjetividad de su época. Pues ¿cómo
podría hacer de su ser el eje de tantas vidas aquel que no supiese nada de la
dialéctica que lo lanza con esas vidas en un movimiento simbólico?”.
“Leer” lo que está
sucediendo en Catalunya como un síntoma, y no como un trastorno, es tratar de
entender la lógica de este fenómeno en toda su complejidad política, social,
histórica, cultural, identitària…y no reducirlo a un simple “trastorno” de la
legalidad o a una cifra en la contabilidad financiera.
Separación, fractura,
ruptura, desconexión, independencia mismo, son términos que se refieren a una topología,
a una articulación de espacios y tiempos cuyo encaje habla de una falta de
proporción. Si pensamos esa falta en términos de impotencia (lo que no podemos
conseguir), las respuestas confirmaran esa impotencia o trataran de velarla con
la omnipotencia.
Si por el contario,
tratamos de guiarnos por lo imposible, aquello que no está escrito, que no cesa
de no escribirse, tendremos más oportunidades de buscar “soluciones inventivas”
Colaboraciones en los medios:
1-O: algunas consecuencias psicológicas de la separación. La Vanguardia. 05/10/2017
Alejarse es darse una pausa. El Periódico. 8/10/2017
Trauma y convivencia. Gestió emocional Rac 1. 7/10/2017